El conocimiento de tu cuerpo es fundamental para resolver los niveles altos de azúcar en la sangre. A continuación voy a intentar describir de forma fácil el motivo por el qué aumenta el azúcar en sangre a la vez que engordas, o dicho de otra forma la relación entre engordar y diabetes.
Antes de empezar me gustaría recordarte que, si todavía no lo has hecho, te des una vuelta por la página principal del web, y revises cuales son los elementos más importantes que intervienen en el cuerpo y que están relacionados con la diabetes. Puedes acceder a la información pinchando el siguiente enlace: «Los jugadores«.
Debes saber que los alimentos están constituidos por tres componentes principales conocidos como macro-nutrientes: proteínas, grasas y carbohidratos.
¿Qué ocurre cuando comes?
- Los alimentos se descomponen en el estómago e intestinos para facilitar la absorción por el cuerpo:
- Las proteínas se descomponen en aminoácidos. Aunque hacen subir los niveles de insulina, también aumentan el glucagón con lo que no deja subir la glucosa.
- Las grasas se descomponen en ácidos grasos y hacen subir muy poco los niveles de glucosa e insulina.
- Los carbohidratos se descomponen en azúcares más pequeños, entre ellos la glucosa.
- La glucosa entra en el torrente sanguíneo
- La insulina (secretada por el páncreas) permite que la glucosa entre en las células para proveer de energía al cuerpo
- Un exceso de alimento provocará que haya más glucosa de la que necesitan las células. Para contrarrestar el exceso de glucosa, el cuerpo generará insulina transformándola en grasa que será almacenada en el hígado para su uso posterior. A la grasa almacenada en el hígado le llamamos glucógeno.
- Cuando el hígado ya tiene la suficiente reserva de glucógeno, el resto de glucosa se almacenará en forma de grasa en nuestros queridos michelines y cartucheras. Es la grasa subcutánea que queda acumulada debajo de nuestra piel.
En resumen, un exceso de carbohidratos llevará a un exceso de glucosa que será resuelto con más insulina para transformar la glucosa en grasa.
Relación entre engordar y diabetes
La insulina, a la vez que permite que las células reciban la glucosa como alimento transformándola en energía, es a la vez «culpable» de que engordemos. Nuestra adicción a un exceso de carbohidratos será compensado por nuestro organismo con más insulina para evitar un exceso de glucosa en sangre.
Cuando el cuerpo ya no puede gestionar de forma adecuada la insulina se produce el efecto conocido como resistencia a la insulina. Puesto que la insulina es fundamental para regular los niveles de azúcar en la sangre y hemos agotado al sistema, no solo engordamos sino que además desarrollamos diabetes.
La mayoría de nosotros conocemos la diabetes en el momento en que nuestro cuerpo es incapaz de metabolizar de forma adecuada los carbohidratos refinados que consumimos.
Así pues, si has entendido lo que ocurre cuando comes y como se descomponen los carbohidratos en azúcares, comprenderás que la recomendación histórica dada a los diabéticos de comer pequeñas porciones varias veces al día se contradice con el hecho de reducir la diabetes.
Cada vez que comes el cuerpo genera más o menos glucosa y la insulina intentará regular tu nivel de azúcar en sangre. Con esto, de forma inconsciente damos paso hacía la resistencia a la insulina y a la acumulación de grasa en el cuerpo.
Para evitar la combinación engordar y diabetes, deberás alejar los carbohidratos de tu alimentación y reducir el número de comidas a las imprescindibles.